25 noviembre 2010

Docente ¿Se nace o se hace?

Esta es una interrogante a la cual por muchos se le ha buscado respuesta apuntando principalmente a descubrir de donde proviene la labor docente, en el presente ensayo se interpondrá ambos paradigmas con el fin de llegar a una aproximación de el concepto docente.

Se nace…

Desde esta visión podemos decir que durante la primera infancia el ser humano tiende a desarrollar la habilidad de instruir, esto se ve reflejado a través del juego, donde niños (as) comparten con otros sus conocimientos o muchas veces instrucciones acerca de como realizar una acción, como por ejemplo al momento de explicar las reglas de un determinado juego, al compartir con los demás algo que ha descubierto, o simplemente por medio del juego simbólico, simulando que se está en una sala de clases y el niño (a) es quien cumple el rol de profesor. Esto a la par con las virtudes y valores propias de un buen profesor, como lo son la paciencia, el interés por que los demás comprendan, tolerancia y por sobretodo amor en lo que se enseña.

Se hace…

Al pasar los años esto en algunos casos se va potenciando a través de lo que conocemos como la ZDP (zona desarrollo próximo) propuesta por Vigotsky, en la cual se postula que los niños (as) aprenden mejor con otros, es precisamente aquí donde se comienzan a dar las primeras conductas que evidencian la vocación por el querer en enseñar y/o compartir lo que se sabe con los otros, en este caso sus pares, donde se genera un aprendizaje basado en la retroalimentación puesto que al enseñar también se aprende. Si esto es apoyado tanto por la familia, interesándose en las habilidades de sus hijos(as) en lo que respecta al quehacer docente y a su vez por parte de la escuela potenciando estas habilidades, motivando al alumno (a) por medio de asignaciones, tales como tutorías donde pueda desarrollar sus capacidades para enseñar y exposiciones donde se estimule la personalidad de los niños(as)

En definitiva…

Si tomamos ambos paradigmas podemos decir que estos se encuentran absolutamente ligados entre si, puesto que no se puede esperar que un niño desarrolle en el tiempo las habilidades y/o capacidades que presenta en la niñez temprana hacia la labor docente por si sólo, sino que es fundamental contar con la estimulación tanto de la familia como de la escuela, durante el proceso de desarrollo, apoyando la vocación innata de los niños (as)

Nos interesa tu opinión!!!

A tu juicio un docente se nace o se hace?

2 comentarios:

  1. creo que se nace con el interés por que los demás comprendan
    el trabajo pedagógico esta en implícito en todos nosotros como un instinto de poder comunicarnos y retroalimentarnos con los demás a lo largo de las distintas etapas de la vida

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  2. Javiera - Patricia - Denisse25 de noviembre de 2010, 17:51

    Agradecemos tu comentario...
    y coincidimos en que el trabajo pedagógico está muchas veces implícito en nosotros...

    nos interesa saber que opinas de la retroalimentación como una herramienta del trabajo docente.. es decir como parte del hacer.

    Saludos cordiales

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